La reparación de las heridas es un mecanismo fisiológico complejo y altamente regulado, fundamental para garantizar la función de la barrera protectora de la piel.
Nuestro organismo la activa cada vez que nos herimos para permitir que los tejidos se curen de la mejor manera posible.
En condiciones fisiológicas, este mecanismo implica tres fases interconectadas:
- Inflamatoria
- Proliferativa
- Renovación
Cuando las heridas se vuelven crónicas: úlceras
En algunas heridas, como las úlceras, este proceso se ve afectado y la herida tiende a no curarse. Las úlceras, de hecho, son heridas crónicas de la piel. Están relacionadas principalmente con los problemas circulatorios o la diabetes.
Pero eso no es todo. En el caso de los pacientes encamados, las úlceras se forman en zonas que están sometidas a la presión del peso del cuerpo durante mucho tiempo (úlceras de decúbito).
Uno de los factores que contribuyen a la difícil cicatrización de las úlceras es la infección por microorganismos conocida como biofilm o biopelícula.
Una biopelícula es un agregado de microorganismos protegido por la presencia de una matriz de polisacáridos que puede adherirse muy bien a una superficie. Como tal, el biofilm es muy resistente tanto a los mecanismos de defensa de nuestro organismo como a los tratamientos antimicrobianos.
Los mecanismos por los que las biopelículas impiden la cicatrización de las heridas aún no se conocen del todo. Hasta la fecha, parece que las heridas con biopelículas permanecen estancadas en el estado inflamatorio, por lo que no avanzan en el proceso fisiológico de reparación de la herida.
Hasta la fecha, el tratamiento de las biopelículas consiste en romperlas mecánicamente, lo que se denomina desbridamiento, seguido de la aplicación de agentes antimicrobianos.
Sin embargo, el riesgo de infección no sólo afecta a las úlceras. De hecho, es posible que incluso las heridas más simples se infecten y tengan dificultades para cicatrizar, sobre todo cuando tienden a reabrirse con facilidad por estar situadas en zonas del cuerpo sometidas a estiramientos (rodillas, codos, dedos).
¿Qué principios activos se utilizan para tratar las heridas?
Plata
Entre los agentes antimicrobianos utilizados para la desinfección de heridas, la plata desempeña un papel fundamental: es conocida y utilizada desde hace siglos por su actividad antimicrobiana. La acción viene dada por el ion plata Ag+, que se forma como resultado de la oxidación del metal plata AgO por contacto con el agua en la herida.
La plata tiene la gran ventaja ya que actúa como un antimicrobiano de amplio espectro y es poco probable que produzca una resistencia bacteriana.
Este último aspecto se debería a que la plata ejerce su actividad antibacteriana con un mecanismo de acción múltiple: interactúa con las proteínas de membrana, bloquea la respiración celular, daña el ADN e induce la producción de especies reactivas de oxígeno.
Ácido hialurónico
La acción de la plata también es sinérgica con la del ácido hialurónico, una sustancia activa que también es fundamental en el proceso de reparación de las heridas.
Esta sustancia tiene la capacidad de retener el agua y liberarla en el tejido. De este modo, genera el entorno óptimo para la regeneración de los tejidos al estimular la producción y la migración de fibroblastos, células endoteliales y queratinocitos.
Gracias a la hidratación proporcionada por el ácido hialurónico, la herida se cura más rápido y cicatriza mejor.
La importancia del vehículo
Un último aspecto, pero no por ello menos importante, es el modo en que estos activos llegan a la herida. La forma técnica utilizada afecta al proceso de curación tanto como los activos.
Los sistemas de agua en silicona (A/Si) son muy eficaces en este sentido. Las siliconas, con sus propiedades para formar películas,crean el entorno ideal para la reparación de heridas.
El mecanismo exacto de acción aún no se conoce del todo, pero su eficacia se debe a la formación de un entorno protegido y no oclusivo. Esto permite que la herida transpire y al mismo tiempo se mantenga hidratada.
La información proporcionada no es un consejo médico. El contenido es meramente ilustrativo y no sustituye el asesoramiento de los expertos.